Archivo por días: 13 de febrero de 2008


El encierro de Pamplona(I) 7

Lo mas conocido de Pamplona en el mundo entero son los encierros de toros. La mayorìa puede pensar que es una locura. Pero yo recomendarìa a todo el mundo que corriese por lo menos un encierro, para poder entender què es lo que impulsa a tanta gente a correr los encierros todos los dias. Ese miedo que se mueve en las tripas, ese nerviosismo, esa adrenalina disparada, esa emociòn de ver cerca de ti a los morlacos.

Mi impresiòn, en los pocos encierros que corri en mis años jòvenes, es algo difìcil de explicar, no comparable con ninguna otra experiencia mas o menos arriesgada. Es una mezcla de devociòn, atrevimiento, inconsciencia, miedo, tradiciòn, locura.
Pero es un espectàculo tan bello y salvaje como lo seria hace 100 años, empañado ligeramente por la masa de «gente» que se introduce en el recorrido no se sabe muy bien con que propòsito.

Despuès de que acaba la carrera, el hormigueo, el corazòn a 180 pulsaciones, esa media sonrisa de satisfacciòn, y a desayunar feliz habiendo saboreado uno de los actos mas queridos por los pamploneses.
Los extranjeros que vienen a Pamplona, casi todos se lanzan a correr el encierro. Muchos de forma inconsciente, sin informaciòn y sin valorar el peligro real de la carrera.
Lo realmente sorprendente es que no haya muchos mas percances graves, con esos temibles animales corriendo entre esa multitud.
No hay duda de que algo hay protegiendo a los corredores y » acompañantes».Lo realmente admirable es que esos anònimos corredores que llevan 20 o 30 años corriendo el encierro a diario, disfrutando de la carrera, sin salir en los medios ni ser famoso. Esos que corren en el encierro por que lo aman, sin ansias de salir en la tele, ni ser «divinos».
Esos son los autènticos corredores, aunque no siempre pillen asta.