Archivo por días: 11 de agosto de 2008

Ando estos días agotado por culpa de los Juegos de Pekín, pues quiero verlo todo, todo y todo. Esto es como el sanferminero que va al encierro, luego a almorzar, Gigantes, vermú, comida, toros, cena, fuegos, cubatada, encierro y vuelta a empezar, como en el día de la marmota. No da tiempo a todo y en los Juegos tampoco.

Andaba yo reflexionando sobre esta verdad incuestionable cuando me vino a la mente esta curiosa anecdotilla que paso a relatar.

Dentro de mi incansable labor de perfecto anfitrión llevé a un amigo andaluz a una comida con mi Peña en los pasados Sanfermines. Andábamos comentando planes para las vacaciones de verano y me dio una envidia horrible cuando me dijo que se iba a Pekín a ver los Juegos Olímpicos. Casualmente, un amigo de mi Peña trabaja allá y, casualmente también, asistía a la misma comida. Así que decidí presentarlos:

-Aupa Fulano, ¿qué tal por China? Este es mi amigo Mengano, que va a ir a los Juegos.

-Ah qué bien, ¿qué días vas a estar? Porque podíamos quedar un día, te enseño cosas y charlamos, que estoy harto de hablar chino e inglés.

-Me parece estupendo; dame tu dirección de email y te escribo.

-¿Vas a ver alguna competición?

-Sí, tengo entradas para natación y voleibol, pero no he podido conseguir para el balonmano, que es mi deporte favorito.

-¡A mí me sobran dos y no sé dónde colocarlas!

-¡No jodas!

Después de eso, me hicieron el vacío.

Yo pensaba que Pamplona era un pañuelo, pero veo que Pekín también. Ahora estarán allá de potes, sin acordarse de quién les presentó hace un mes.

Cabritos.