103 cosas que NO hacer antes de morir 3
Después de estar estos últimos días enzarzados en discusiones entre pro y antitaurinos, voy a seguir la tónica de mis colegas, pasándome a un tema más banal.
El caso es que la semana pasada escuchando la radio, oí un comentario sobre una reseña aparecida en la sección de viajes y literatura del Times, acerca de un libro que, escrito en tono de humor, trataba sobre una lista de esas cosas que en ningún caso debe uno hacer en su vida.
Como alguno ya se habrá imaginado, una de esas 103 cosas es correr en el Encierro en San Fermin.
Picado por la curiosidad, he entrado en la página web del Times y tras haber buscado con la palabra Pamplona (y haber encontrado únicamente referencias a los rojillos y su partido con el Glasgow Rangers ¡que tiempos aquellos, ahora que vamos de capa caída!.. ) finalmente tecleando también ‘bulls’ junto al nombre de la ciudad, he encontrado la referencia al libraco en cuestión.
Básicamente en el resumen sobre el Encierro, dice que los que han participado en él experimentan, cuando están delante de esos enormes bichos, una sensación de subida de adrenalina, que es lo más parecido a lo que debió sentir el hombre prehistórico cuando era perseguido por algunas de las fieras que poblaban la tierra en aquellos tiempos.
Con la diferencia de que nuestros antepasados no lo hacían de forma voluntaria, si no para salvar sus vidas y que si les habrían dado la opción, habrían preferido estar en la playa bebiendo Rioja.
A mí me ha hecho gracia y por lo menos le reconozco al individuo éste, que no trivializa el Encierro (que luego hay mucha gente que se mete a correr pensando que esto es un cachondeo y así luego pasa lo que pasa).
Otras cosas que tampoco recomienda el autor es bucear con tiburones, saltar en paracaídas, escalar el Everest, ir al Polo Norte o pasear por las Ramblas en Barcelona ¿?