El Ambigú. 2
No se si todo el mundo conoce el Ambigú de la plaza de toros. Es ese garito o bar o barra que hay en el interior de la plaza de toros. Donde te tomas una fresca caña antes de entrar al tendido. Donde sales después de la merienda para tomarte unos carajillos, o copas, o cubatas o lo que sea.
Para uno como yo, al que la lidia de los toros mas bien le importa un pimiento, me sirve como lugar de encuentro con conocidos cuando me escapo del tendido. Cuando tienes la vejiga a punto de reventar, sales corriendo hacia el W.C., y a la vuelta haces una parada técnica para tomarte un carajillo. Si te encuentras con más de un conocido la cosa se puede prolongar hasta el quinto o sexto toro.
Hace unos años había una barra donde un amable caballero servía solamente cava. Teníamos por costumbre tomar una copichuela, que te dejaba una tremenda acidez en el estómago, pero era como un ritual.
Cuando abandonas el Ambigú, camino de tu localidad en el tendido, te das cuenta que tu visión ha empeorado bastante, y piensas que necesitas gafas de cerca. Cuando consigues llegar hasta donde está tu cuadrilla, resulta que el sexto toro va ya muy avanzado, y no entiendes como te ha costado tanto volver.
En fin, creo que cada uno tiene sus costumbres, y yo cuando acudo a la plaza, me gusta tomarme unos carajillos en el ambigú, disfrutando del buen ambiente de camaradería que tenemos todos durante las fiestas.
Que ratos mas divertidos he pasado en el ambigú, con gente a la que sólamente ves en San Fermín, pero que sigues echándote unas risas igualmente. Qué tendrán estas fiestas que a todos, o a casi todos nos predispone para pasarlo teta, olvidándonos de todos nuestros prejuicios y malos rollos.