Archivo por días: 3 de junio de 2010


Ya tenemos alineación para el encierro 13

Así es. Jokin Zuasti, entrenador-jugador, ha convocado para los encierros amistosos de este mes a los siguientes corredores: Daniel Oteiza, Sergio Colás, Iñigo Echániz, Julen Madina, Ricardo Echarte, Aitor Zuasti, Juanpe Lekuona (éste si se recupera de su lesión), el propio Jokin Zuasti y Richard Calvo.  Así lo contaba ayer el Diario de Noticias.

Pero, ¿no estábamos acordando en las «mesas» que había que recuperar el anonimato?  Vivo en un sinvivir, como no se recupere Lekuona a tiempo de su lesión, ¿qué va a ser de nosotros? ¿es que no basta con la crisis mundial que estamos padeciendo?

Esto ya es un cachondeo. Voy a plantear aquí mis propuestas para recuperar el encierro. Sé que son duras, y exigen sacrificio, pero serían útiles, y no tanta reunión ni mesa, que aportan soluciones-azucarillo que luego no dan resultado.

La recuperación del encierro orbita en torno a tres pilares básicos:

1.- Sanciones económicas ejemplarizantes

En otras ocasiones lo he dicho. Es la risa que a un gicho que agarre del rabo a un toro, y le haga volverse, y el toro organice una escabechina, se le enganche y se le imponga la escalofriante multa de 100 €. ¿No sería mejor que la sanción fuese de 30.000 €? Bajaría el número de mangarranes, y además podría sufragarse el coste de los encierros sin gastar del erario público.

2.- Supresión de las retransmisiones en directo

Es una pena, pero involuntariamente la televisión ha fomentado durante años el que el encierro se convierta en la serpiente multicolor, y en los últimos tiempos ha convertido el encierro en un espectáculo con el que se llenan horas de pantalla. Y una forma muy sencilla de hacerlo es dar bola a corredores amiguetes, o a corredores que quieren ser artistas y los amos de las pistas.

3.- Retirada de los pastores

Nos estamos preocupando demasiado de que el encierro no sea peligroso. Y echamos pegamín por la calle para que no se resbalen los bichos. Y tenemos una cuadrilla de pastores que se juegan el pellejo a diario para asegurarse de que los toros avancen, y el día menos pensado podría ocurrir un disgusto con ellos. Sin pastores se recuperaría la esencia de que los mozos tiren de los toros hacia adelante, aunque entiendo que esto ocurriría a medio plazo. Al principio los subnormales que corren detrás causarían graves problemas, que ellos mismos pagarían. Suena duro, pero encierros dantescos disuadirían de entrar a mucha gente; encierros seguros invitan a entrar.

Mientras no nos atrevamos a hablar con esta crudeza, seguiremos mareando la perdiz. O seguiremos proponiendo mejoras de la seguridad que harán que más gente se sienta con valor para entrar al recorrido, en una salida de tiro por la culata antológica, ya que para reducir los riesgos de la masificación se toman medidas que fomentan la masificación. Somos unos cachondos.

El que entra a un encierro debería saber a lo que se expone. Y si no lo sabe, que espabile.

En fin, concluyo, a ver qué tal sale Zuasti del papelón de sustituir a Lekuona si éste no se recupera de la lesión.