La Plaza de Toros de Pamplona 6
Se levanta al final de la Estafeta una de las construcciones más emblemáticas de la ciudad de Pamplona. Proyectada en 1.920 e inaugurada el 7 de Julio de 1.922, la Plaza de Toros de Pamplona es uno de los monumentos más reconocidos de nuestra ciudad. Muchos pamploneses la conocemos porque durante muchos años hemos visitado sus tendidos y andanadas durante las fiestas. Pero no muchos la hemos visto vacía, durante el año. En un silencio total.
Hace unas semanas pude visitar la Plaza de Toros de Pamplona. La Plaza abierta para 6 personas. Vacía. Pudiendo ver el patio de caballos, los corrales, el toril, el callejón. Y como impone estar en el centro del ruedo con las gradas vacías y mirar para arriba e imaginar la sensación que tiene que ser estar ahí acompañado de un toraco y casi 20.000 personas. Lo cierto es que a los que estuvimos allí, incluyendo a una pareja de fuera de Pamplona, nos encantó la visita. Y nos preguntamos, como tantas veces, porque la Plaza no se abre al público y se aprovecha uno de los mayores reclamos turísticos que tiene la ciudad.
Fuera de la temporada taurina, la Plaza se usa para un par de ferias hosteleras, algún mercadillo navideño y cada vez menos para acontecimientos deportivos o musicales. En muchas ocasiones se ha discutido sobre la idoneidad de cubrir la Plaza con el fin de poder sacarle más provecho durante el año y darle más utilidades. E incluso en el blog leímos que alguno quería proponer un columbario allí (en la última reforma alguna ceniza se mezcló con el hormigón).
Mi propuesta es muy obvia. Montar en los interiores de la Plaza un pequeño museo con cabezas de toros, trajes de luces y fotografías y abrir la Plaza al público. Que se pudiese pisar el ruedo, ver el callejón por donde entran toros y mozos en el encierro, el patio de caballos, los corrales, etc… La mayoría de turistas que vienen a Pamplona suben por la Estafeta siguiendo el recorrido del encierro y llegan al callejón donde se encuentran un portón cerrado. Si la Plaza estuviese abierta estoy convencido que entrarían uno detrás de otro ya que para muchos de ellos es el monumento más conocido de Pamplona.
La Plaza pertenece a la Casa de Misericordia y también su gestión, pero creo que el Ayuntamiento debería invitar a esta Santa Casa a darle a la Plaza más uso. Hace poco me decía un conocido que se estaba trabajando en este tema. Quizás alguien nos pueda confirmar este hecho.