HEMENDIK LAU HILABETERA – DE AQUÍ A CUATRO MESES 1
De aquí a cuatro meses, sonará el despertador a eso de las 6.50 y en mi interior pensaré:
—No puede ser cierto.
Los pasos que de por el pasillo de casa me indicarán si sigo borracho o no. El resultado tampoco alterará la rutina.
Me vestiré de blanco inmaculado, con el pañuelo y el polo de mi peña y me encaminaré a Santo Domingo. Recordaré coger la entrada de los toros y la txartela de la comida. En la cuesta coincidiré con viejos conocidos alguno de los cuales solo veo de año en año. Aparecerá alguien de gaupasa. (También podría ser yo). Levantaré el cartel del cántico bilingüe y tras el encierro, pasaremos los minutos hasta el almuerzo tomando “angelitas” (moscatel con sifón), mientras los putos castas compran churros en la Mañueta.
Almorzaré en el Irrintzi y me encaminaré hacia la peña Anaitasuna, que celebrará el día del socio. Habrá un lunch que no probaré y beberé unos kalimotxos para ir entonando el cuerpo. Salida mañanera con la peña y a comer en la piscina. Quizá llegaré a la foto oficial, o quizás no, y rumbo a la primera de feria con el emotivo momento de entrada y el cántico del himno de las cortes de Navarra.
Primera salida peñera, bailes, más kalimotxos y llegada al Anaita, hogar dulce hogar, donde el perímetro de seguridad nos impedirá alejarnos mucho de allí en varios días salvo para casos excepcionales. La noche se alargará lo que el cuerpo decida. Y lo que quedará todavía…