Archivo por días: 25 de octubre de 2017


IX Certamen Internacional de Microrrelatos de San Fermín

UN SUEÑO CUMPLIDO

Ekiñe Zaratiegui Iriarte

Una joven Pamplonesa, a punto de cumplir su mayor sueño, unos dicen que es algo de locos, otros que es de valiente, ella prefiere decir que es un sentimiento.

Levantarse a las 6:30am, llenar el estómago y una duchica para calmar los nervios. El pantalón y la camiseta como la cal, la faja a la cintura y el pañuelico rojo con el santo al cuello, nudo a los cordones y listo!

Hora de encomendarse al Santo, una vez terminados los ritos, toca ir para el centro, con los nervios a flor de piel llega al recorrido. Parece ser que hay que esperar un poco a que comience el gran momento, temblores en las piernas, respiración ajetreada y sudor en las manos, ya falta menos.

Por fin el reloj dan las 8 y se oye el tan esperado cohete, la joven esta en telefónica esperando a la manada, ya llega, hay que empezar a correr, baja telefónica oyendo únicamente a la manada, se adentra en el callejón donde el mundo se aísla y llega a la plaza de toros, su sueño se ha cumplido, es inevitable echar algunas lágrimas.

Un juego de niños, una pasión de mayores, un sentimiento que pasa de padres a hijos.
 

CITA A CIEGAS

Daniel Ruiz Rodríguez

Alfred Savage, residente en el 145 de Howe Street de Auckland, Nueva Zelanda, ultima a través de agencias online los preparativos del viaje a Pamplona, España. Allí espera encontrarse con una amiga del chat, Kathy, que asegura vivir en Chelmsford, Inglaterra. La cita es el 6 de julio a las 11:00 am (hora peninsular) en el bar Txoko de la plaza del Castillo.

Kathy no vive en Inglaterra, ni siquiera ha estado nunca allí. En realidad reside en el 14 de Hayden Street, también en Auckland, Nueva Zelanda, a escasos metros del domicilio de Alfred. Su nombre tampoco es Kathy, sino Vanessa (Brown, de apellido), y en el instituto estudió con Alfred. Se sentaban muy cerca, cuenta ella en un e-mail a una amiga íntima. Vanessa no prepara ningún viaje. “Así pagará por todos estos años de indiferencia”, apuntaba en el e-mail.

Comentarios de los lectores:

Sferminero: ¡Vayamos todos el día 6 a las 11:00 al Txoko a recibir a Alfred!

(Noticia filtrada por WikiLeaks y publicada a finales de junio en un periódico local navarro.) 

EL PRIMER BERGAZO.

Carlos Guzmán Pérez

Había transcurrido casi un año, y por fin su infantil momentico estaba a punto de producirse. Bajo el sol de aquella primera tarde sanferminera, sobre los hombros de su padre, inquieto y expectante a partes iguales, no podía aguardar ni un solo minuto más.

Pocos segundos después de la hora señalada, el estruendoso redoble de los tamboriles comenzaba a escucharse, y una marabunta blanca y roja encaraba aquella cuesta flanqueada por decenas y decenas de silletas.

Desde su privilegiada posición comenzaba a visualizar todos los detalles; las crines de los primeros zaldikos, la majestuosa parsimonia del Alcalde, la brillante corona de Joshemiguelerico…

La comparsa ya estaba ahí, pero aun faltaba él. ¿Dónde se había metido? Impacientemente miraba de un lado a otro buscando aquel famoso tricornio, pero no lo encontraba. Napoleón, Patata, Berrugón… ¿Pero dónde estaba él?

De repente, escuchó unos chillidos familiares, y tras el faldón amarillo de Joshepamunda por fin apreció aquella avinagrada silueta abriéndose paso con rápidos bergazos. De forma ágil se desencaramó de aquellos hombros, emprendió una frenética carrera, y tras un par de atrevidos quiebros recibió el buscado primer bergazo. ¡Por fin! ¡Ya habían empezado sus Sanfermines!