Archivo por días: 29 de octubre de 2020


XII Certamen Internacional de Microrrelatos de San Fermín

EL ENVIADO

Omar Balmori Mayoral

Los nervios ya no están. Ahora solo importa no caer, no estar entre los últimos. Una loca sensación de: ¡Tengo que poder! Avasallada al unísono por el terror de esas puntas afiladas, que rasgan el aire en cada movimiento de cabeza. Delante: manchas blancas, negras y rojas; detrás: un rostro aterrorizado como el mío. Mientras esos cuernos, parecieran ya destinados a romper mi escudo, mi última esperanza de no convertirme en el próximo.

Unos me gritan… otro me empuja… ¡Mis manos se aferran a todo! Ese periódico que fingí leer, la camiseta del que va delante. Alguien tira de mí por el hombro. Me vuelvo horrorizado. No sé qué pretende, pero ya es tarde. Mis pies se cruzan y… mientras en el aire floto, siento el resuello del animal, que alocado y con más miedo que yo, sigue su loca carrera.

Desde el suelo, convencido de estar lastimado, aunque sin dolor, veo, como a traves de un cristal, pasan los toros y la gente. Pareciera que todos sangran por la cintura. Tan blancas sus ropas, tan rojas sus fajas… Alguien me ofrece una mano. Yo extiendo las dos, no sé quién es, pero en ésta hora… ¡Es el enviado de Dios!
 

LA CALLE DE TODAS Y TODOS

Fermin Unzu Rey

NO ENTENDÍA LO QUE ME DECÍA HASTA QUE ME LEVANTÉ Y ABRÍ LA VENTANA, MI HIJA ME GRITABA: QUE HOY ES FIESTA AMATXO¡¡¡ EL SOL Y LA MUSICA ENTRARON POR LAS VENTANAS Y DECORARON CON SU JUBILO TODA LA HABITACION. MI IMAGINACIÓN NO HABIA SIDO CAPAZ DE INTUIR QUE LO QUE ESTABA VIENDO Y OYENDO FUERA POSIBLE. NO HABIA TIEMPO QUE ESPERAR NOS VESTIMOS LAS DOS Y SALIMOS A BAILAR Y CANTAR, Y A QUE ESA NUEVA OLA DE ESPERANZA E ILUSIÓN NOS ARRASTRARA.
ELLA MIRABA TODO Y SONREIA Y YO POR FIN OLVIDABA LAS PENAS ENTRE CANCIÓN Y CANCIÓN.
LA MAGIA DE LOS SANFERMINES SIEMPRE HA SIDO ASÍ, SOLAMENTE CON EL AMBIENTE, LA GENTE, LA ALEGRÍA Y EL RESPETO, SE CREA UNA ATMOSFERA DE SUEÑOS Y PASIONES QUE LIMPIAN LA CIUDAD DE TODO LO PASADO, Y NOS GRITA A PLENO PULMON, UN RUGIDO DE ESPERANZA Y DE NUEVAS SENSACIONES CASI OLVIDADAS.
AHORA YA NO TENEMOS INCERTIDUMBRE, NI TRISTEZA, NI AMARGURA; AHORA SOMOS GOZO, FELICIDAD Y HADAS REVOLOTEANDO EN MEDIO DE UN NUEVO MUNDO SOÑADO.
SI PEQUEÑA, AHORA BAJAREMOS, YA HEMOS BAILADO SUFICIENTE EN EL BALCÓN, AHORA YA NOS TOCA BAILAR EN LA CALLE, EN NUESTRA CALLE, EN LA CALLE DE TODAS Y TODOS.