XII Certamen Internacional de Microrrelatos de San Fermín
CON TIEMPO EN LAS ENTRAÑAS
María ángeles ´ Rubio Gil
La noche anterior a entregar el libro sobre la vega del Arga, tuve un sueño muy vivido. Era una estampa de otra época: un joven de pelo rizado corría el encierro, y después aparecía en una orla, quizás militar, porque llevaban zamarras. En mi corazón sentí un grito: “me lo han matado”.
Tras enviar aquel trabajo y de celebración, una desconocida me inquirió en calle Zapatería: “no creas que has terminado, alguien que viene contigo, una bella antepasada, quiere que la incluyas”. Al día siguiente, comencé una segunda parte: “Son los encierros reminiscencias de la conducción de reses desde las dehesas a los corrales medievales. Al amanecer, los mozos los corrían para no poner en peligro a mayores o a la infancia del antiguo Reino de Pamplona”.
Abuelos, niños, tierra, folklore…Vi entonces la historia completa, una antigua foto de tía Arima sola…La que tuvo que partir a Barcelona tras romper con el abuelo, que luego casó con su hermana pequeña. Contaba que vivía frente a la cárcel modelo, para cuidar a su novio miliciano tras la guerra. Pero nunca existió esa pareja; porque volví a la foto, a ver la tristeza en su mirada, y en la saya abultada, encontré la respuesta.
A FLOR DE GAITA
Ruben Vitas Ruiz
Llega el día, me pongo la americana, la corbata y por supuesto no me olvido de los nervios. Lo veo, Pamplona se viste de blanco otra vez, llenando la ciudad de vida y de emoción un año más. 6 de Julio, 10:30, la hora va llegando. Mis compañeros y yo detrás de la puerta viendo la plaza llenarse más cada vez, tintada de rojo y blanco. 11:30, nervios y emoción, ya no se que pensar. Puedo ver el brillo de todos en los ojos, tenemos ganas de salir, es como si fuéramos a comernos el mundo. De repente silencio, siento como mi corazón se acelera, por poco saliendo de mi pecho. Toda la plaza de color rojo alzando los pañuelos queriendo tocar el cielo. «Pamplonesas, Pamploneses, viva San Fermín. Iruindarrak, gora San Fermín». El cohete llega al cielo dando comienzo a lo que todos esperábamos desde hace un año, era nuestra señal. Pasillo enorme abriéndonos paso en la plaza. Gaitas y tambores sonando en cada esquina. Miedos, dudas, adrenalina, emoción, felicidad, mezcla de sentimientos inolvidables, y tú, ¿ Qué sientes?