Archivo por meses: febrero 2023


XIV Certamen Internacional de Microrrelatos de San Fermín

CLEMENTE, HOY TE DOY MUERTE.

Yolanda Almeida Rodríguez

Bendito vino tino, bendita croqueta y bendito sea el cuerpo que llevo en la maleta. Recién cortado en pedacitos pequeños, los dedos, las manos, la cabeza. Traquetean las ruedas a lo largo y ancho de Estafeta, entre el gentío, el agua, se cae una maceta. Vestidos todos la cadera y el cuello de rojo sangre, del hilo que voy dejando en la calle. Del blanco impoluto, ¡viva San Fermín! Viva mi madre que en paz descanse. Me santiguo como buen creyente y allí le dejo el regalo a mi amigo Clemente. Su compadre, Gerardo, duerme ya junto a los peces. Y yo, como buen pamplonés adoptado, disfruto hoy entre los pasacalles como lo hacía con mi padre aquel verano donde Clemente le dio muerte, como un toro bravo un siete de Julio frente al vallado. 

VIVE SAN FERMÍN

Yolanda González Nieto

Chupinazo que retumbas cual redoble de tambor, en los mozos eres duende que desata su furor, inhalando la templanza de los mansos y exhalando,con cordura, la bravura ante los bravos. Mareas blancas con pañuelos rojos al cuello recorren las calles, calles que laten fuerte bajo sus pies haciéndolos vibrar al paso firme y fugaz de bestias y valientes. Tradiciones que los nenes desde pequeños adquieren pues «Torico de fuego» a los niños entretiene y como quieren más, «Kilikis y Zaldikos», son risa y susto a la par, coronados con los fuegos que a Pamplona hacen brillar. Bota, alpargata y música;fiesta, encierro y religión; agua fresca que desde los balcones alivian el calor. No hay fiesta en el mundo entero que se pueda comparar y grandes como Hemingway así lo hicieron constar. Vive San Fermín y déjate enamorar.  

FLAMENCONA

Zaira Palanco Souza

El aire sopla con olor a emoción, preguntas inquietantes dentro de cada uno, se asoman las nuevas caras expectantes para ver qué va a suceder. En ese instante cierras los ojos, respiras profundo, como si el tiempo se detuviera, la música, la gente y todo al alrededor desapareciera y solo quedarais tú y el reloj, contando los minutos para que sean las 12:00.
De repente sientes que te aprietan la mano y ves una sonrisa, la alegría reflejada esperando expectante.
¡PUM! ese sonido tan ansiado después de tanto tiempo, todo el mundo salta, baila, se abraza y grita
¡VIVA SAN FERMIN!
¡GORA SAN FERMIN!
En ese momento somos todos iguales, sin importar color, nacionalidad y si hablamos el mismo idioma.
Pamplona brilla vestida de blanco y rojo.
Ya se habla entre las peñas de la corrida de toros aun faltando muchas horas para ello. Escuchas a los joteros, los cantos de algo que te hacía falta escuchar:
No te vayas de Navarra
Si no quieres que me muera
Flamencona
No te vayas de Pamplona… 


XIV Certamen Internacional de Microrrelatos de San Fermín

EL ASOMBROSO CASO «IKER HOSTOZ»

Victoriano Alcalde Azcune

Iker Hostoz, un chaval sano y alegre, a los ocho años de edad comenzó a desarrollar una extraña cojera en la pierna derecha. Los médicos efectuaron miles de pruebas al pequeño Iker, sin llegar a encontrar ninguna evidencia para el origen de su cojera.
El padre de Iker, el señor Hostoz, también era cojo del pie derecho. Sin embargo su cojera tenía una explicación bien obvia, pues había sido causada por el asta de un toro, cuando era joven, mientras corría el encierro de San Fermín. Pero tal y como dictaminaron los médicos, es imposible que una cojera accidental sea hereditaria; así que el caso de Iker Hostoz quedó diagnosticado como el primer caso conocido de «cojera mimética».
Hoy día, cuando los vecinos ven al señor Hostoz junto a su hijo Iker, ambos cojeando sincrónicamente de la misma pierna por las aceras de Pamplona, no saben si sentir lástima por Hostoz padre, con la desgracia de tener un hijo cojo como él, o sentir envidia por la suerte de tener un hijo que lo ama tanto… tanto que incluso ha desarrollado la cojera mimética de la que les he hablado.
Muchas gracias por sus aplausos.
Sí, claro, no se sorprendan si yo también aplaudo.
 

UN BAÑO DE FIESTA

Virginia Urieta Martínez

Huele a tierra y agua, a tormenta de verano. Como las que te sorprenden en julio. Y te transportan a un chupinazo, hace ya 20 años, con las puntas del pelo recién teñidas de rojo y un chaparrón capaz de mudar al rosa una camiseta blanca impoluta. Al tatuaje de tinta en el Paseo de Sarasate que se convierte en un borrón en la espalda con el grito del primer concierto. El agua brota de los balcones y no hay mejor momento para darse un baño de fiesta que por San Fermín.

Por sus noches largas en cuadrilla. Las comidas de trabajo, ‘almuercicos’, dantzas y jornadas maratonianas. Por los heridos del encierro en el hospital. Y nuestra primera quedada en las barracas, con la excusa del mogollón de gente para escabullirme si no me convences del todo. La pelota, ese 12 de julio que siempre será el nuestro. Volver a verte al día siguiente. El encierro. La porción de pizza en San Nicolás y la cerveza en el quiosco, sin beso al final de la primera cita pero sin separarnos después. Sin fuegos artificiales pero con ‘capotico’ del Santo para llegar hasta aquí. Y celebrar, por fin, que todo vuelve a ser como entonces.
 

LA BÚSQUEDA

Yheysson Victor Limpe Ylla

—Lo admito, soy un foráneo. Deja de ver mis zapatos deslenguados. Así es, mi sombrero tiene agujeros. ¿Cómo dices? Claro, sí, está hermosa la Fiesta de San Fermín. Mi padre siempre la añoraba. Decía que acá, la noche brillaba seis veces seguidas, y que, de día, toda la gente era amiga.

«Ay, muchacho. Pero yo no vine por jolgorio, alcohol, ni amores; busco a mi amigo. Soy de una granja lejana y llegué, porque aquí anda mi toro. Un animal de tinta, con un ángel en la frente. ¿Loco? No lo estoy. Lo tuve desde ternero, fue muy pequeño, como un perro. ¿Ahora te pones a reír? Pues sí, tienes razón. No debí venderlo, me hace falta. ¿Seguro que no lo viste? Está besado por las margaritas: lleva un corazón blanco entre los cuernos.

El hombre dejó de hablarme y con el morral en la espalda se perdió en la multitud. Al acabar la semana, me enteré por mi padre, que algún loco vaquero irrumpió en el último encierro. «¡Borracho, deja disfrutar la fiesta!», le gritaron, tirándole latas, celebrándolo. Pero el hombre se metió, y llorando abrazó a un bovino. No pudieron detenerlo. Se lo llevó, cabalgándolo, como a un penco.
 


XIV Certamen Internacional de Microrrelatos de San Fermín

PADRE

Victor Daniel Estigarribia

Ya tenía mí ropa dispuesta desde el día anterior, pulcra, lavada y planchada. Pero por algún motivo sentía que algo me faltaba. No era algo de organización sino de… cierto!
-Madre pon la tele me verás correr como lo hacía papá.
-Hijo mío, porque insistes en correr, sabes que me da miedo.
-Ma, yo también tengo miedo, pero más miedo me da no poder conectarme con mí padre, nunca llegue a correr con él antes que falleciera pero su pasión por esta fiesta fue más grande que su miedo y eso me lo traspaso a mí, tengo miedo de salir lastimado pero tengo la pasión intacta y corriendo por mis venas. Así que pon la tele ma, porque te prometo que hoy me verás correr como nunca nadie lo hizo porque mí padre corre conmigo. 

LIBERTO

Victor Manuel Fernandez Fernandez

Un estallido perturba la paz que reina a mi alrededor. El olor a pólvora inunda el ambiente. Las puertas se abren. Mis músculos se tensan presa de la emoción. Agacho la cabeza y comienzo a correr. La multitud que me rodea me impide ver a los cabestros. A mis espaldas un morlaco bragado acelera el paso. Sus imponentes pitones se reflejan en el espejo de un escaparate comercial. El húmedo suelo adoquinado hace que resbale y esté a punto de caerme. Mi corazón se acelera al llegar a una estrecha calle abarrotada de gente. Apenas puedo encontrar un hueco para continuar con mi carrera. Mi respiración
entrecortada se entremezcla con los ecos de los vítores que brotan de los balcones. Un mozo que corre a mi lado sosteniendo un viejo periódico se apoya en mi espalda. Le miro fugazmente y su cara palidece. Al final de la calle se vislumbra otra puerta. Acelero emocionado el paso ante mi inminente regreso al hogar. En el callejón, una montaña de gente interrumpe mi ansiada liberación. Embisto con toda la fortaleza que permite mi extenuado cuerpo. Finalmente, tras acceder al ruedo localizo a los cabestros para acompañarlos en su dócil paseo hacia los corrales. 

LAS COSAS DE LA PANDEMIA

Victor Raul Rincon Villamil

Vemos las noticias, los periodistas hablan de una enfermedad llamada Covid- 19 que se está gestando en Asia, que rápidamente se esparcirá por todo el mundo. Mucha gente de mi país riéndose y algunos de mis amigos adjudicando que eso solo pasa por allá lejos. Y lamentablemente la pandemia se apoderó de nosotros, con ello las cuarentenas obligatorias. Dejando a muchos sin trabajo, otros aguantando hambre, sin embargo, unos utilizaron la virtualidad para seguir con su vida como: estudiar, trabajar y en entretenimiento. Muchos de los que inicialmente se burlaron de la epidemia murieron o algún familiar de ellos.

 

  


XIV Certamen Internacional de Microrrelatos de San Fermín

SALTO AL VACÍO

Uxue Gayarre Corella

Cada día de aquellos sanfermines era diferente paradójicamente diferente, siguiendo rituales incansablemente y aún así vertiginosamente sorprendentes.
Como iba a saber que aquel día daría el mayor salto al vacío que jamás nadie haya dado. No, no fue la distancia en metros, sino el abismo en tiempo. Concretamente toda una vida, llena de todas sus cosas: vidas, muertes, risas, llantos…separan el punto de partida de aquel beso en lo alto de la acera, todavía existente en San Nicolás, aquel 12 de julio de 1994, de este momento de 2022.
Allí estaba yo, forastera sorprendida e inbuida en la fiesta y allí abajo a escasos 20 centímetros estaba él, el amor de mi vida, en la calzada repleta de gente, que no existía para nosotros. Vivimos sin saberlo el salto al vacío que cambió nuestras vidas.
28 años después sigo esperando con ilusión esas fiestas y esos besos cada día.
No será casualidad que sienta vértigo al cruzar tus pasarelas Pamplona, será que un salto en tus calles, en sanfermines, cambió mi vida.
 

ENSUEÑO TAURINO.

Valentín García Valledor

Esta noche, tras un largo viaje a Pamplona y hospedado junto a mis colegas en un alojamiento exclusivo, la he pasado entre pesadillas y vigilia. Varias veces he soñado con un camino vallado y sinuoso, rebosante de mucha gente vestida de blanco y con pañuelos rojos en el cuello.
Tal vez por eso, ahora, tras escuchar cánticos a San Fermín y un fuerte chupinazo, justo al abrirse el portón del corral, el instinto me dicta que sólo tengo que correr rápido y sin perder de vista el lomo de alguno de mis compañeros de viaje. 

SAN FERMIN 2047

Vanesa Arrondo Jiménez

Faltan sólo unos minutos para las 12h del 6 de Julio… y que diferente resulta ya todo…
La vida ha cambiado mucho. Echo de menos incluso las aglomeraciones, el gentío, las altas voces de madrugada que no te dejaban dormir, las villavesas a rebosar de gente…
Pero sobretodo, el buen ambiente, la gente tan amigable, las buenas risas, los bailes interminables, lo favorecidos que estábamos todos vestidos de blanco y rojo, la música por todas partes, la fiesta a todas horas…. El buen rollo que transmitía todo el mundo.
Han pasado muchos años desde aquel 2019… Cómo disfruté ese año con mis chicas, qué tiempos aquellos! Hoy me he levantado algo triste, pero aún así, mi espíritu Sanferminero, sigue más fuerte que nunca. Así que me sobre el mono blanco hermético anudo el pañuelo rojo al cuello, cojo mi copa de cava, y me preparo para gritar un VIVA SAN FERMÍN!, rodeada de unas grandes paredes de hormigón, en mi búnquer a bajo kilómetros bajo tierra y completamente sola….
 


XIV Certamen Internacional de Microrrelatos de San Fermín

EL SUEÑO DEL REY TROVADOR

Sylvain Sortelle

Teobaldo viajó a Pamplona desde su lejana Champaña envuelta en neblina para regir aquellas desconocidas tierras que había heredado de su madre Blanca. No tardó en aprender las lenguas que allí se hablaban. Pero siguió escribiendo sus madrigales en francés.

Después de un laborioso día con los preparativos de la cruzada y la elaboración del Cartulario, se acostó, no sin antes haber escrito algunos versos de amor con una copa de vino de la Ribera en la mano.

Tuvo un sueño vívido: astures, cántabros, vascones, lombardos, sajones y francos, unidos en una celebración digna de la gloriosa Roma. Regocijo por doquier, bebida y comida a raudales, farandolas, charangas, peleas de gallos, torneos, sogatira y levantamiento de piedra. Oía el bullicio, veía a los mozos zambulléndose en las fuentes, olía el aroma de las costilladas en las parrillas, los ajos tiernos, las morcillas, las sopas con sacramentos. Se paseaba la cabeza de San Fermín de Amiens en un rico relicario de oro por las calles ante los vítores de su pueblo donde se mezclaban cohortes de ermitaños que habían bajado de sus montañas y peregrinos en su tránsito hacia Santiago.

Unos gigantes de madera y tela vigilaban su sueño.
 

ROJO ES EL COLOR

Teresa Agorreta Fernandez

Con paso firme y decidido avanza entre la multitud. Imposible pasar desapercibido. Es la pasión andante, dicen unos. Es la fiesta en estado puro, dicen otros. Es un atentado al buen gusto, un auténtico esperpento, dicen los más eruditos.
Singular.
Auténtico.
Natural.
Fantasmagórico.
Estrafalario.
Rutilante.
Magnífico.
Irresistible.
Narcisista.
¡Es sólo un hombre vestido de rojo! 

THE HAPPINESS BOMB

Tim Pinks

It had been a soulless time of darkness, sadness and despair. For two years there existed neither red nor white. A plague had silenced the Happiness Bomb.
It is without doubt the biggest manmade explosion on Earth. Bigger than all the evil bombs ever made: metaphorically speaking it literally shakes the planet off its axis. In reality, Earth stays where it is…but some of the people on it shift into another realm.
When this thing erupts, it doesn’t destroy, it creates. Love, laughter, joy and happiness. Alegria. It’s not a fatal fusion of desolation but a magical creation of jubilation.
At noon on July the 6th in front of the Town Hall thousands of hearts and souls will erupt simultaneously. Around town, tens of thousands do the same. In Navarra, make that half a million.
Worldwide, those that can’t be there will feel their spirits soaring and hearts longing.
Because after two years when the music, dancing, laughter and happiness disappeared because a virus forced San Fermin into fiesta exile…our beloved Saint will return. With his Beatific Bomb. It spreads joy.
Midday July 6th…the Fiesta Big Bang will be back. And happiness will reign.