Toros


¿Unos Sanfermines sin corridas de toros? 2

 

Como algunos sabréis el Partido Animalista, PACMA, ha publicado estos días un video en el que apuesta por unos Sanfermines sin maltrato a los animales, y por tanto, sin corridas de toros. En el video se recogen varios testimonios de personas que, aun habiendo estado alguna vez en la plaza de toros, rechazan la lidia del toro, y también se recogen otros testimonios que apuestan directamente por la desaparición de las corridas de toros. Posteriormente, al grito de «esta es mi fiesta», «hau nere festa da», se muestran distintos momentos entrañables de los Sanfermines.

Yo no entraré en polémicas, ya que llevo más de veinte años yendo a los toros a la plaza de toros de Pamplona, y reconozco que, aunque no soy un gran entendido de la materia, disfruto del espectáculo, aunque reconozco el sufrimiento que soporta el animal.

Por otro lado, y como bien me contó un gran amante de los toros, en caso de prohibirse las corridas de toros, la raza de toro bravo de lidia podría desaparecer, ya que no habría ganaderos que criaran animales tan majestuosos sin obtener beneficio por su venta.

En fin, una polémica que parece no tener fin, con opiniones e intereses muy enfrentados y que jamás logrará satisfacer a todo el mundo.

http://especiales.publico.es/publico-tv/video/517282/pacma-lanza-un-campana-en-defensa-de-unos-sanfermines-sin-corridas-de-toros

Bienvenidos a los nuevos colaboradores del blog, seguro que nos amenizarán esta larga travesía hasta San Fermín 2016. Ongi Etorriak!


¿De quien depende? 1

 

La semana pasada en su debut en este blog, idenercio escribía un post titulado “San Fermín cambia para que todo siga igual”. En el mismo explicaba cómo eran los Sanfermines de su padre tan diferentes a los de ahora y dejaba en el aire la pregunta de hacia dónde van los Sanfermines incluyendo algunas sugerencias. Esto hizo que me hiciera la siguiente pregunta: ¿De quién depende que los Sanfermines cambien o que sigan la misma línea de los últimos años? En unas fiestas que decimos populares, ¿depende del Ayuntamiento o depende del pueblo?

Evidentemente hay cambios que están en manos del Consistorio. El nuevo Ayuntamiento llegó poco antes de las fiestas al gobierno municipal y no pudo acometer demasiados cambios ya que el programa estaba prácticamente cerrado. Sí llevaron a cabo un cambio que muchos solicitábamos desde hacía tiempo y es el hecho de que el lanzador del txupinazo no fuera un político. La duda queda en si la forma de elegirlo fue la adecuada.

Este año tienen varios meses para plantear un nuevo modelo para los Sanfermines. Las Mesas del Encierro y de los Sanfermines han sido infrautilizadas. Habrá que ver si los nuevos gestores atienden las sugerencias de los participantes en estos meses, aunque no me consta que se hayan reunido todavía. Lo que tengo claro es que le modelo de fiesta no se cambia con novedades en el programa o invitando a otras ciudades. Las medidas que deben tomarse para evitar el macro botellón actual deben ser drásticas y duras, y no tengo muy claro que puedan llevarse a efecto.

¿O somos los ciudadanos los que podemos cambiar el modelo de fiesta? ¿Queremos? ¿Qué significa “unas Fiestas más participativas”? ¿Participaríamos de ellas si lo fuesen? Yo sé cómo son los Sanfermines de muchos pamploneses. De la mayoría diría yo. Encierro, almuerzo, gigantes, vermú, jala, toros, cubateo. Ponerlo en el orden que queráis. ¿Cambiarias vuestros Sanfermines actuales por otros distintos?

Lo que quiero decir con esto es que igual no nos gustan demasiado estos Sanfermines, pero sí nos gustan nuestros Sanfermines. En cualquier caso veremos cómo afronta el nuevo Ayuntamiento el reto de enfrentarse a unos Sanfermines que para mucha gente ya no son lo que eran y para otros siguen siendo lo mismo.

P.D: Saludos a l@s nuev@s.La veteranía es un grado y seis media docena.

 


Los toros atletas

Tal y como se viene constatando en los últimos años, cada vez más el encierro se parece a una carrera de atletismo de velocidad en la que el objetivo es batir la marca, y no el de guiar a las reses hasta los corrales de la plaza, marcas que este año se han batido casi sin despeinarse. Además de la velocidad de los toros atletas, lo más destacable ha sido el toro que no quiso correr el día 11. De la «originalidad» en el vestir de los corredores del final de Estafeta, hablaremos otro día.

Dadas las fechas en las que nos econtramos, en la que tan lejanos nos parecen los Sanfermines 2016, es buen momento para recordar lo que los encierros de los cercanos Sanfermines 2015 nos dejaron, con estos magníficos vídeos de rtve.

Día 7

Día 8

Día 9

Día 10

Día 11

Día 12

Día 13

Día 14


Sal si puedes. 2

 

 

Es noche cerrada en la plazuela de San José. El sonido de los caños del agua de la fuente rompe el silencio bajo las faldas de la catedral. Una pareja, al fondo de la plaza, aprovecha su momento. El del silencio, oscuridad, caños y faldas. Todo revuelto, investigándose mutuamente, devorándose el uno al otro con deseo. Ajenos al resto del mundo, ignorando incluso el golpe de las pezuñas que anuncian la llegada de Minutón, salinero y mortal, huyendo del gentío de la plaza de Navarrería.

Está herido, nervioso y sangra copiosamente por su costado debido al disparo del difunto Rastamaría. Lo primero que hace es abrevar en la fuente, aplacando esa sed, maldita sed que nunca se acaba. La penumbra de la plaza le permite mimetizarse y tener unos segundos de descanso. Su respiración, fuerte y acelerada, es lo único que le delata.

La llegada de unos coches con sus hirientes sirenas rompen esa paz. Dos Coches de policía cortan sendas salidas de la plaza. De uno de ellos baja Don Eduardo, el mayoral. Su cara es un poema. Se puede intuir el disgusto debajo de su sombrero. Los policías tienen las armas desenfundadas .Don Eduardo, pidiendo calma con la mano, implorando por la vida de Minutón. El sabía que venía a ver su muerte, pero en el ruedo, no de esta manera. No se lo merece, musita para sus adentros.

De repente, uno de los coches salta por los aires, debido al embate del resto de la manada. Su entrada, colosal, hace que todos se queden estupefactos. Han seguido a su jefe. Cinco mayestáticos Miuras rodean con su presencia la fuente, abrigando y escoltando a Minutón. Unas vueltas alrededor de la fuente para inspeccionar el lugar y tomar decisiones. No se han percatado siquiera de la pareja de tortolitos que, petrificados y sin meter ruido, contemplar desde el rincón oscuro del deseo la escena. Testigos de algo único.

Minutón, extenuado, acusa la pérdida de sangre. Su extraño viaje está a punto de concluir. Al menos, está arropado por sus hermanos. Poco a poco, va reculando hacia el callejón Salsipuedes .La manada le sigue de manera ciega, como siempre. Nunca les falló y no hay que dudar de él. A pesar de que el final de la calle sea una pequeña iglesia carmelita y no tenga salida. De ahí su nombre en el letrero. Es lo que tiene ser un Miura, que no vas a la escuela a aprender a leer.

Es la oportunidad que estaba esperando Don Eduardo, que en un instante, saltando como un resorte cierra el callejón con la verja del convento, encerrándoles. Por nada del mundo quiere ver una balacera con sus toros.

Sólo al correr el cerrojo de la verja deja salir todo el sufrimiento que llevaba dentro. Como un preso, con las manos en los barrotes, contempla con lágrimas en los ojos a su manada. Al fondo del callejón, al abrigo del convento carmelita, seis Miuras, con la cabeza bien alta, las orejas desplegadas, en posición de ataque, mantienen la mirada con el mayoral. Nunca tuvieron miedo, y menos en ese momento. Eran ellos los que habían sembrado el pánico por las calles de Pamplona, con nocturnidad y alevosía. Su posición de ataque confirmaba su bravura. Manteniendo, hieráticos, la mirada con el Mayoral, como pidiéndole explicaciones. O quizás retándole. Quién sabe.

Desde La plazuela San José, cogollo de Pamplona ,callejón Salsipuedes, seis miuras, dos coches patrullas, dos tortolitos, un mayoral, un convento, una catedral y una fuente, forman el final de las aventuras de Minutón, Salinero y ya para siempre, inmortal.

 

THE END.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


ALDAKETA – EL CAMBIO

El compañero “El casta” especula en sus posts con las edades sanfermineras poniendo sobre la mesa diferentes actividades y actitudes según el segmento de edad en que está cada uno.

Pero además de la edad hay otros condicionantes importantes como la situación personal o las ganas de cada uno. Por ejemplo, hay un cambio considerable entre si se tiene hijos o no. Sin duda, es una limitación significativa cara a ciertas labores a realizar en Sanfermines.

Necesitas apañar con la familia si te quieres escapar un día con tu pareja. Debes negociar el abono de los toros y estar acompañado de silleta y cientos de enseres en los vermús. Cambios de ocupaciones sanfermineras: salen despavoridas las gaupasas y los encierros, que dan paso a gigantes y payasos infantiles. Esa curiosa estampa de madres con silleta que esperan la salida de los toros dejas de verla como un fenómeno sobrenatural. Por las mañanas buscas los gigantes en vez de las dianas. Lees “La cenicienta” y te recuerda a tu propia vida sanferminera, ya que a las doce estás en casa. Estás tan pendiente de un potito y de un biberón como de un vino con su frito. A las escasas horas de sueño de la propia vida de las fiestas tienes que quitarle todavía alguna más…

En definitiva, mucho cambio pero seguro que merece la pena. Quizá alguien lo descubra en breve.