Gaupaseitor


TXIKITO

Txikito era un hombre peculiar. Tan pequeño de estatura como grande en corazón, era gran amante de la juerga y, por lo tanto, para él los sanfermines eran su mayor ilusión.
Sus años nos dan para multitud de anécdotas; como aquella de al cumplir años en plenas fiestas, su cuadrilla se juntaba en su casa para cenar y celebrarlo con su madre de anfitriona aunque él nunca aparecía, ya que seguía de juerga.
Él comentaba que en Sanfermines casi no salía de la calle Jarauta, que simplemente se asomaba hasta la calle San Lorenzo a ver los fuegos artificiales y que luego volvía. Así hasta el catorce.
O que en fiestas de Tafalla dejaba su bolso en una pensión, que recogía a los dos días sin tocar ni aparecer por allí. Él afirmaba, siempre dudamos de esa versión, que no llegaba al pulsador del segundo piso y que la del primero tenía muy mala leche y no le abría.
Iba coleccionando anécdotas hasta que una enfermedad las frenó en seco. Esto le impidió seguir con sus juergas pero no la fiesta.
Probablemente cualquiera en su situación hubiéramos huido de la ciudad durante las fiestas al no poder vivirlas como siempre lo habíamos hecho pero él, no. Las empezó a disfrutar de otra manera. Siguió sin perderse una. Continuó yendo a todas las cenas de escalera y allí donde había un acto de federación de peñas o de la peña Anaitasuna acudía, aunque fuese solamente a ver que se cocía por ahí. Él era sanferminero en vena y no podía dejar de serlo.
Hace unos días nos dejó para siempre.
En estos tiempos en que no sabemos dónde está el bien ni el mal, no sé si te habrán enviado al cielo o al infierno pero lo que sí estoy seguro es que allá donde hayas ido estarás disfrutando de San Fermín a tu manera y lo llevarás junto a tu Peña Anaitasuna en el corazón.
Goian bego, Txikito, beti gure artean egongo zara.


IRUÑEKO AGENDA – AGENDA DE IRUÑA 1

Una nueva macrodiscoteca va a abrir en Iruñea. Dicen que reavivará la vida cultural de la ciudad. Apuestan por una programación espectacular con actos durante el año. También se puede mover por los barrios, como los camiones-escenario de las grandes orquestas.

Esta brutal agenda constará no solamente de conciertos, sino de multitud de actos, muchos de ellos solidarios. No se ceñirá únicamente a la ciudad. También apuesta por salidas organizadas.

¿Macrodiscoteca?

No.

Son dieciséis locales. Se llaman peñas de Pamplona-Iruñea. Y todo lo anterior lo llevan haciendo durante varios años. Pero, ¿alguien es consciente de ello? ¿Hasta qué punto se valora?

Las peñas nunca han tenido buena reputación. Salvo para cuatro castas, si les preguntas sobre ellos, te dirán que son cuatro viejos, borrachuzos, que desahogan las penas del año en San Fermín y que el resto del año no salen de casa.

Sin embargo, desde hace unos cuantos años llevan enriqueciendo la vida cultural de la ciudad prácticamente a coste cero.
A día de hoy, todas las peñas en sus locales organizan multitud de actos. Si multiplicamos esto por dieciséis, nos sale una aportación increíble.

En conjunto han grabado un disco, han publicado un libro sobre la historia de los sanfermines y ha sido un activo importante en temas como la lucha contra la violencia de género.

A través de Gora Iruñea montan un espacio con conciertos y distintas actividades pensadas en diferentes públicos.
Durante el año, realizan multitud de charlas, ciclos literarios o exposiciones.

A nivel deportivo, desde el campeonato de futbito interpeñas hasta diferentes cross, pasando por ¡carreras de traineras entre peñas!

También visitas solidarias dentro de la misma programación sanferminera a lugares como El Vergel, el Manicomio o la Meca.

Esta parte que realizan las peñas es la gran desconocida de la sociedad.

Si la imagen que se desprende es totalmente distinta a lo que estamos contando, ¿no habría que trabajar el tema de la imagen? ¿No sería interesante una rueda de prensa en diciembre, cuando nadie se lo espere, explicando todos los actos que se van a realizar en las diferentes peñas? ¿Tendríamos que valorar el invertir en empresas profesionales que realicen un lavado de imagen?


IRUÑEA, CAPITAL MUNDIAL DEL ARTE – ARTE MUNDUKO HIRIBURUA

Hoy. Ese día en que Pamplona-Iruñea se convierte en la capital mundial del arte. Donde el carnicero, pasa a ser un especialista en tonalidades y técnicas. Donde el director de finanzas nos da una clase magistral sobre tratamientos para un buen diseño mientras afirma que su hijo de tres años presentaría algo mejor. Donde el vecino conoce las últimas tendencias pictóricas. Donde el tertuliano también entiende de composición. Donde el compañero de trabajo, de repente, conoce los aspectos crómaticos y la técnica de cada cartel. Donde el cliente del bar también entiende de tipografía y combinaciones artísticas, mientras comenta que los temas no están muy trabajados. Donde toda esa gente cuyo sentido en la vida es criticar se encuentra en su salsa. Ese día.
Y todo por esto:

Felices críticas y feliz elección.

Salud, kalimotxo y anarkía.


PUNKIAK ETA BERE ZUTABEAK – LOS PILARES PUNKIES

Religión: El punk es nuestro dios y Evaristo su profeta. Gatillazo debe tocar todos los años en San Fermín.

Comercio: Libertad para que los camellos puedan realizar su trabajo correctamente y tiendas con accesorios para el botellón.

Toros: Vuelta de los punkies a la plaza cuando termina la corrida. ¡¡¡Meca solución ya!!!

Folklore: Menos folklore y más hard-core. Mayor presencia del punk en charangas, fanfarres y gaiteros. Abolición del reggaeton. Contratación de Evaristo como jotero para la procesión.

Indumentaria: La cresta nunca debe faltar. Se descarta la chupa de cuero con cremalleras blanca y cinturón rojo de pinchos. También se acepta el negro como color festivo.

Alcohol: Kalimotxo debe ser la bebida principal de las fiestas. Siempre deberá ser con vino de botella y en vaso de cubata. Entre tres y cuatro hielos y con rodaja de limón. No al kalimotxo de polvos.

Salud, kalimotxo y anarquía.


GAIXOA NI, BALUARTEN – POBRE DE MI, EN EL BALUARTE 1

El Pobre de mí es otro evento polémico. Castas y gaupaseros chocan de plano en este acto.
Los primeros acuden al ayuntamiento con su vela y se desprenden del pañuelo a los doce con puntualidad inglesa.
Los segundos estiran la última noche en la que, los más valientes, llegan al encierro de la villavesa.
Es muy complicada la convivencia entre ambos en el tramo de la noche que va desde las diez hasta las dos. Unos se indignan porque los otros siguen de marcha con su pañuelo puesto como si nada y a los otros les repugna que les recuerden que se terminan las fiestas a ritmo de velas.
Para evitar todo ello, llevaríamos el acto del pobre de mí al baluarte.
Se pondría una pantalla gigante en el frontal en el caso de que hubiera más demanda que entradas.
Como hablábamos a principio de curso de retrasar una hora el inicio del chupinazo, también lo haríamos con el pobre de mí, lo cual nos quitaría a las familias con niños pequeños, que se irían antes a la cama.
A la salida pondríamos unos soportes donde dejar las velas de diferentes tamaños que servirían para adornar la plaza del Baluarte sin necesidad de quemarse las manos. Esto sustituiría a dejar el pañuelo en la Iglesia de San Lorenzo.
Con todo esto lograríamos el no ver la estampa de velas en el casco viejo para la gente que quiere disfrutar de la noche y los castas veleros tendrían un acto más emotivo en el Baluarte.

Kalimotxo, punk y anarkia.