Una vez más cuando comenzamos a creer en Pamplona que el sol existe, las noticias relacionadas con los sanfermines vuelven a coger fuerza… selección del cartel anunciador de las fiestas, cartel de la feria del toro, certamen de microrrelatos (ojo que vamos a por la VII edición!) y acercándonos al día 6 la protesta bicolor de los petas con la vuelta a los también tradicionales debates, el encierro, la necesidad de publicitar o no la fiesta, etc, etc.
Normalmente las noticias no se suelen salir de ese marco también tradicional. No obstante siempre puede haber alguna noticia que se salga de lo “normal”.
Este es el caso del reality sanferminero propuesto por la productora zeppelin. Si este reality se hubiera encuadrado dentro del marco habitual seguramente no habría trascendido a la opinión pública ni hubiera llegado al ámbito político. Ejemplos de programas que han querido reflejar la vida sanferminera, en su buena o mala imagen, hay muchos.
Pero en este caso el reality toca directamente el encierro. Este programa se basa en que unos expertos corredores de los encierros se encargan de preparar a unos famosos para correr delante de los toros. Dicho lo cual, comenzamos mal ya que arranca la polémica entre “los divinos” y el resto de corredores, el anonimato del corredor y las camisetas de colorines, y cobrar por correr en el encierro.
Indican que la preparación que deben realizar no es sólo física y técnica sino que también es psicológica. Desde mi punto de vista no creo que haya muchos divinos o corredores que cumplan con la capacidad para cubrir 100% las tres facetas. No dudo de su vasto conocimiento para preparar planes de entrenamiento físico o técnico. Tendría una gran duda con la capacidad del famosete o famoseta de turno en asimilar los conceptos en un periodo breve de tiempo y de ponerlos en práctica en la realidad.
Sobre la parte psicológica veo un par de temas. El primero es que no tengo dudas en que nuestros expertos corredores son capaces mantener al personal motivado para que participen en la carrera (este sería el éxito del programa, que participen todos) pero no sé hasta que punto están capacitados para entrar en la cabeza del famoso de turno y dejarles claro que el encierro mata. No es como en isla margarita, que si se encuentran mal van en una barcaza y se los llevan. Aquí hay muchos números para tener una mala caída que provoque alguna luxación abrasión o rotura o lo que es peor una caída involuntaria delante del toro sumado al reflejo que querer levantarte y escapar… tiene muchos números de que le pase algo grave. No hay nada más que ver en las fotografías situaciones inexplicables entre los mozos y los pitones. En ese momento empiezas a creer en el capotico de San Fermín.
La dificultad es hacerles conscientes de esto, de que un toro en el encierro puede matar, teniendo en cuenta que la estadística dice que el porcentaje de corredores a los que les pasa algo grave es bajo.
¿La seguridad de este reality se basa en la estadística?. Esto es un error ya que la gente muere y si te toca no esperes la barcaza con los médicos. Ahora bien, si te tiene que pillar un toro mejor que te pille en Pamplona. El encierro es real, no un reality.