Quién de nosotros no ha comido de esos churricos de «La Mañueta»? Todos hemos hecho largo rato de cola para conseguir esos churros tan ricos. Se ha convertido en una tradición ya.
Hace ya 135 años que se fundó, en 1873, y es una de las churrerías más legendarias de nuestro país. Abre únicamente durante San Fermín, y en el mostrador se puede ver todavía dispensando deliciosos churros a la nieta del fundador , Dª Paulina Férnandez Martínez. Sus seis hijos, la mayoría de ellos titulados en Medicina, le ayudan en un ritual que es todo un homenaje a sus ancestros. El aceite que usan para freir los churros se calienta con hornos de leña, y parece ser que tiene que ser con madera de haya y cortada a mano, para que dé ese sabor tan delicioso. Trabajan sin parar hasta las once de la mañana, sudando a mares y aguantando altas temperaturas, fabricando churros tal y como se hacían hace un siglo.
Yo recuerdo la última vez que comí esos churros, había gente esperando desde las 6 de la mañana, pero la espera mereció la pena. Que ricos saben después de una noche de jarana. Y también es importante si tu mujer te recibe con cara de pocos amigos. Le llevas unos churricos y se le cambia la cara, jeje. Y la verdad es que no se que tienen esos churros pero no son como los de las barracas, que para cuando los despegas de los dientes………
Al loro, porque no abren sólo en sanfermines. Si no me equivoco, lo hacen también el día del Corpus y, atención, los domingos del mes de octubre. Por lo menos así era hasta hace poco.
Oye, a mi que me sientan los churros como un tiro después de una noche de zafarrancho…
Prefiero más unos huevos fritos con chistorra.
Confirmo que abren todos los domingos de octubre. Por lo menos ese cartel pone en la puerta de la churreria