Tras días de procesiones y poteo y de descanso para el despertador, iniciamos con ilusión el trimestre que nos lanzará de cabeza a nuestra plaza consistorial el próximo 6 de julio.
Y nosotros, desde blogsanfermin.com calentaremos el ambiente con nuestra cita diaria y con el III Certamen Internacional de Microrrelatos de San Fermín. Ya nos comentó Sanferman el pasado miércoles algunas de las novedades, como el cambio de patrocinador, el aumento del límite a 204 palabras y algún cambio en el Jurado, que este año estará compuesto por José Luis Allo, poeta y secretario del Ateneo Navarro y los escritores Patxi Irurzun y Carlos Erice, que próximamente publicarán sus nuevas novelas. Este año no podremos contar con la colaboración de Eduardo Laporte, pero sabemos que nos seguirá en la distancia y con ganas de conocer los relatos ganadores.
Y hablando de ganadores, aquí os dejamos estas dos perlas, vencedoras de la primera y segunda edición.
EL ULTIMO ENCIERRO, de Javier De Prada (2009)
(A San Fermín pedimos…)
Al alzar el periódico vi la mancha de sangre seca en mi mano. Entoné la plegaria intentando conjurar el miedo que ascendía por el pecho y me abrasaba como una cornada caliente.
Me llamó la atención su indumentaria, como de otro tiempo, la quietud hierática y su mirada sombría. La esquivé clavando los ojos en la hornacina.
(… dándonos su bendición.)
El último canto era la señal para que cada cual ocupara su puesto, como una emboscada en un desfiladero. Descendí la cuesta empapado por el pánico. El peligro ya olía a pólvora.
Me siguió, tocó mi espalda y me espetó:
– Tú no me conoces. Soy Esteban. Caí en 1924.
Me señaló una figura borrosa con la que nadie tropezaba. Sujetaba un pedazo del santo capotico.
– Y también están los otros doce, en su lugar del recorrido, atentos al quite.
Entonces descubrí con estupor mi camiseta desgarrada y sanguinolenta.
Me dijo conmovido:
– Sí, Matthew, corriste tu último encierro en 1995. No pudimos hacer nada.
El estallido del cohete silenció mi grito incrédulo.
Y me abracé a él llorando mientras la manada ascendía como un tren cremallera y pasaba por encima sin reparar en nosotros.
El EXAMEN, de José Ramón Alonso (2010)
Una escuela de Pamplona. Cerca ya de las vacaciones. El maestro reparte a los muchachos de primero de bachillerato un papel con la siguiente lista:
Toros, siete de julio, encierros, pañuelo, champán, Agur Jaunak, txupinazo, mozos, Pamplona, San Fermín, periódico, la Plaza del Castillo, vino, Hemingway, Navarra, Riau-Riau, toros, kalimotxo, Estafeta, gigantes, los fuegos artificiales, cornada, Rioja, peñas, mulillas, kilikis, el Gayarre, bares, encierro, Jarauta, bacalao, policía, ganadería, pastores, cerveza, Ciudadela, encierro, Corporación, fiesta, Fiesta, caídas, cabestro, julio, “Pobre de mí”, Osasuna, vals de Astráin, santo patrón, merienda, chicas, charanga y más toros.
Cuando termina de repartirles las hojas, les dice
– “Háganme una redacción sobre los Sanfermines sin usar ninguna de las palabras de esa lista”
Uno de los muchachos tras dar un vistazo rápido a la hoja y con una mirada de estupor, balbucea:
– “Pero esto es imposible”.
El maestro sonríe, le mira y dice:
– “Usted no ha entendido nada. Lo importante no está ahí. Pónganse todos a la tarea”.
Por tanto, ya podéis ir cogiendo papel y boli y plasmad vuestras ideas que podréis mandar entre el 1 y el 31 de mayo, siguiendo las bases y las instrucciones que iremos publicando a lo largo de esta semana
¿Al nuevo miembro del jurado, le gusta también el jamón? Es para ir encargando.
Gaupaseitor, a la vista de los resultados de pasadas ediciones, creo que vas a tener que pasar directamente a untar a los organizadores, y no tanto al jurado.
Suerte al Jurado. Sorprendiome la ausencia Carlos Erice en una serie de entrevistas que hizo el Noticias a 8 escritores navarros de actualidad. Una lastima, su opinion sienpre resulta interesante…
Sí, a mí también me chocó, Pamplo. Estaría de vacaciones…
Una pena no estar este año, ahora q empezaba a coger tablas (o algo así) como jurado. Razones familiares obligan.
Os seguiré desde la distancia, pero no del olvido. (Y ahora que lo pienso, soy libre, ergo puedo participar, jej)