NI MU
Javier Castrillo Salvador
Me había autoimpuesto la labor de cuidar del novato en su primer encierro. Ya había pasado por ahí: la muchedumbre, la confusión, las caídas… Correr sin pensar, aislado, asustado, a merced de todos los peligros.
Los de la cuadrilla no eran tan considerados y “El Berrenda”, alardeando de su condición de veterano, espetó la primera sanjuanada: ¡“Morucho”, como no le eches más huevos -con perdón- te van a pillar!
En la curva de Mercaderes tuve que soltar un empujón a mi colega para no acabar contra las vallas. “El Berrenda” volvió a la carga: ¡Anda, si “El Moru” se nos ha echado un guardaespaldas… Pero qué poca raza tenemos!
No estábamos para malgastar fuerzas en contestaciones. Los “Jandilla” trotaban ya a nuestra altura y al fondo de Telefónica se vislumbraba el ansiado callejón.
La entrada al coso prometía ser limpia, estirada, pero “El Berren” se giró para soltar otra chorrada y nuestro novatillo se lo llevó por delante sin inmutarse. Dos volteretas y lo perdimos de vista en pleno follón.
Apareció camino de los corrales, magullado y con cara de pocos amigos. Venía derecho a por él. Me interpuse en su camino: ¡Fue culpa tuya, así que no digas ni mu, pedazo de cabestro!
CORRERÍA
Agustin Antonio Gomez Lorente
Ayer empezó todo y ahora estoy aquí, corriendo. A algunos los conocí ayer, pero estoy con los míos. ¡Hay gente por todos sitios! Me tocan en la espalda. ¡Es normal! Quizás empuje a alguien para poder pasar. ¡Esto está a rebosar! ¡Sigo corriendo! ¡La curva! ¡Qué golpe! Sigo. Alguno de mis amigos se queda atrás. Creo que se ha caído. ¿Le espero? ¡Ya los veré luego! ¿Por dónde voy? Me dejo llevar. ¡Voy a tener que empujar! La gente se aparta a los lados. ¡Personas en el suelo! ¡Apiñadas! ¡Me tengo que abrir paso! Creo que he pisado a alguien. No están todos los amigos, los nuevos y los viejos. ¡Hay que seguir! Ahora no me voy a parar. ¡Tengo que salir de aquí! Pero ¿Por dónde? No conozco esto. ¡Me estoy agobiando! ¡Seguiré corriendo! Aunque a veces no he tenido casi sitio, por ahora he podido pasar sin mucho problema, pero ese ruido… y ese olor… con lo que me gusta el olor a campo, a jara… esto se estrecha mucho. Mucha gente. Empujones. Parece que delante hay más espacio. ¡Esto es otra cosa! Miro a mi alrededor y siguen sin alcanzarnos ¡Creo que allí enfrente está la salida!
UNA PALABRA POR HORA
Iñaki Arbilla Ruiz
Espera Víspera Vigilia Blanco Faja Pañuelo Amigos Abrazos Amigas Besos Almuerzo Huevos Jamón Tinto Gentío Bullicio Prisas Multitud Cava Ayuntamiento Empujones Apreturas Gritos Proclamas Cánticos Sudor Reloj Cohete Desenfreno Explosión Cava Nudo Bares Música Bailes Risas Guiris Hello Ligoteo Goodbye Fuente Salto Locura Katxis Suciedad Gafas Gorros Collares Orines Amistad Vómitos Cachondeo Alcohol Noche Exaltación Caricias Retirada Amor Oscuridad Magreos Sexo Agotamiento Despertador Madrugada Resaca Café Ibuprofeno Nervios Ducha Calle Encuentros Saludos Estiramientos Tensión Agonía Terror Explosión Trote Codazos Pulsaciones Lucha Cuernos Carrera Compás Caída Dolor Cascos Montón Pánico Vallado Salvación Orgullo Reencuentros Comentarios Chocolate Anécdotas Churros Abuelos Silletas Niños Comparsa Gigantes Chupete Txistus Danza Tambores Cabezudos Fotos Sonrisas Hombros Kilikis Lloros Miedo Procesión Jota Santo Aplausos Emoción Corporación Pitidos Terraza Descanso Vermú Ambiente Fritos Sociedad Mantel Vasos Platos Recuerdos Rosado Ajoarriero Cantos Mulillas Peña Cuadrilla Cubo Hielos Trompetas Bombo Tuba Saxofón Pancarta Plaza Sol Multitud Almohadillas Ruedo Eurovisión Zurracapote Toro Torero Capa Lidia Banderillas Arte Sangre Faena Muleta Espada Muerte Oreja Vuelta Gloria Flores Sombra Merienda Potxas Kalimotxo Puro Humo Arena Callejón Alegría Expectación Algarabía Calles Gente Estruendo Agujetas Globos Cervezas Bocadillos Murallas Césped Silencio Fuegos Estridencia Colores Belleza Asombro Cansancio Promesa Barracas Luces Tiovivo Mareo Algodones Regreso Malestar Sueño Cansancio Viva Sanfermín