Fiel y puntual a la hora fijada, a las 8:30 horas se oye a Palacios por la habitación a un volumen que hasta el vecino creo que se habría enterado, y de un bote y sin hacerme para nada el remolón (mi mujer aún no se explica cómo sólo durante los días de San Fermín no me hago el remolón ni se me pasa la hora……, por qué será???, jejejeje) me levanto y voy directo a la ducha, este día tengo que oler bien (siempre procuro oler bien), me tengo que poner guapo y hay que ir pronto a almorzar, viene mi cuñado con mi hermana a buscarnos para llevarnos a almorzar y llevarse a mis hijas (gracias Josetxo y Eva, sois unos soles), así que entramos ya a almorzar como cada año a la bodeguica de siempre (no haré publicidad, que tampoco lo he hecho de la empresa en la que trabajo, jejejeje), pero asegurándome de que me pongo en el lugar idóneo, donde no me pueda manchar ni pueda haber riesgo de incidente alguno, que otro año me hubiera dado igual, pero que ese día me hubiera puesto de muy mal humor. Le pido al camarero un taco de servilletas, le pido los huevos con lomo y patatas con poco tomate (no merece la pena jugársela hoy), y en medio de un nerviosismo atroz, almuerzo yo, porque mi mujer ya había desayunado y yo creo que por los nervios no tenía hambre.
Unto los huevos sin arriesgar y como cada cosa despacito, sin jugármela para no mancharme y brindamos al acabar el almuerzo con la cuadrilla del día 6 (cosa curiosa la mía que por circunstancias he acabado almorzando con gente que no es de mi cuadrilla habitual, pero que cada día 6 de Julio estoy fiel a la cita con ellos como si de uno más se tratara, son cosas que pasan en la vida, pero es así y aprovecho para mandarles un saludo a todos ellos, a quien no le ha pasado una cosa de ésas que sólo pasa y sucede en San Fermín????) y apenas hacemos cuentas les abandonamos con prisa por miedo a llegar tarde a la cita detrás del Ayuntamiento («a las 11:00 horas en punto el que no esté no entra», ésa era al menos la orden desde protocolo). Llegamos y ahí estamos los 5 con nuestras respectivas parejas, aún más nervioso todavía me pido mi primer kalimotxo del día, aun a sabiendas de que ese hielo mal colocado, o ese empujón inoportuno me puede aguar todo el cuidado que había tenido hasta ahora. Una vez bebido todo, nos dirigimos los 4 con nuestras parejas, hacia la entrada lateral del Ayuntamiento, al encargado del cohete comienzan a asediarle los medios de comunicación, conocidos….., etc., y empezamos a ver entre asombros a gente que no esperábamos encontrar allá y que sabemos que el que estén allá dará que hablar en el grupo, pero en fin, son cosas de última hora que decidimos que no empañen nuestro gran día, porque al fin y al cabo era el gran día para todos, para los que estábamos, y para los que no estaban allá, así que por un momento perdemos, o nos secuestran mejor dicho, a Mari.
Yo reconozco que me sentía como un privilegiado, y la verdad sea dicha, hasta estos sanfermines no me había dado cuenta realmente del cariño y admiración que le tiene Pamplona a la Comparsa en sí, es una pasada, y para mi realmente es una GOZADA!!!!, ¿por qué no voy a reconocerlo????. Conforme íbamos pasando puertas la gente nos miraba y nos daba la enhorabuena, nos señalaban con el dedo, o con las miradas como diciendo «míralos, son ellos» y la verdad que no sabíamos ya a dónde mirar, al menos yo, y nada más entrar al primer piso, que realmente es el segundo si entras por atrás, viene una periodista de Diario de Noticias y nos dice:
-«hola, soy Fulana de tal (perdona pero no me acuerdo ni del nombre, lo siento) y me han encargado que no me separe ni un instante de vosotros»….,
Ufff…, los sudores junto con las fotos empiezan a sucederse, se empieza a respirar aire de fiesta, todo son miradas, saludos, sonrisas (unas falsas, otras no, jejeje), tiradillas entre los políticos, y empieza nuestra particular cuenta atrás, en la que nos separaran de nuestras mujeres y nos subirán al piso de más arriba, al bueno, al oficial, al que uno desearía poder ver cualquier 6 de Julio, y que se asoma por el hueco de la escalera como mirando hacia el más allá, como a la cumbre que me imagino que mirará un montañero conforme está llegando a la cima, ahí nos subirán a las 11:30 horas. Llega el momento, ni siquiera los periodistas dejan que nos despidamos de nuestras señoras que ya están mezcladas con el resto de invitados, el Ayuntamiento ya empieza a ser una locura, minutos antes viene Yolanda (permíteme que te tutee, jejejeje) a tranquilizarnos (madre mía que tablas tiene esta mujer, es impresionante, de verdad!!!!), y empezamos a darnos cuenta de que ya sólo quieren al protagonista del cohete, que no es otro que Mari Ganuza, ya nosotros les empezamos a dar igual, y sólo le buscan a él, todo el mundo comienza a gritar y a preguntar
-«Mari, ¿donde esta Mari????»,
y nosotros andamos como para tranquilizar, pero sin perder la sonrisa les aseguramos que ya viene, que está abajo hablando con los periodistas, hace ya un rato que se ha perdido de nosotros, aclamado por ellos, los periodistas, y su familia que comienza a llegar y a agolparse en el Ayuntamiento y a abrazarle, a besarle y a decirle y recordarle la suerte que va a tener (la verdad que si, ¿quién hubiera sido él???), pero él creedme que se lo ha ganado, y eso nadie se lo puede negar, ni se lo podrá negar jamás, porque un cohete es quizás poco para recompensar a Mari, que habrá hecho cosas mal, no digo que no, pero de sobra todos sabemos que ha hecho muchas bien, y hoy los gigantes están como están gracias a él, y eso no se paga con nada del mundo, y que lo que ha hecho mal sigo pensando que no lo ha hecho con mala fe.
Pero no vengo a hablaros de Mari, que aunque es el protagonista del comienzo de la fiesta, el de este momento soy yo, que soy el narrador de lo que sentí estando allí, jejejejeje.
Ya te veo embadurnado de servilletas mientras comes los huevos con lomo, jode que presión para almorzar. El vino con pajita y el café con mucho cuidado.
Hubiera salido mejor pedir el almuerzo batido y de un trago para adentro.
Creeme que no descarte esa opción….., pero fijo que se me rompía el vaso, o algo así….., ha sido el almuerzo con más presión de mi vida….., te lo aseguro.
Si me estoy poniendo hasta nervioso…No se si será la emoción o la ilusión que sentías, pero ya vemos tu admiración hacia ELLA.No sé si se hace, que no creo, pero lo que sí podia hacer el Ayunta era repartir invitaciones entre los pamploneses para poder vivir esa experiencia.
Pequeños dramas en los que nadie piensa cuando os ve en el balcón del ayuntamiento: habéis tenido que almorzar sin mancharse.
Entre lo de la blackberry de ayer y lo de los huevos de hoy, veo que esto de tirar el cohete es un puto sinvivir.
Pamplonudo, no sé si merece la pena, ja, ja…
Lo raro, Toko Toko es que no os pasara algún contratiempo para llegar a las 11 a la trasera del Ayuntamiento.
Aún dudas de que lo hagan?????, para entrar al Ayunta, a lo que sea, tienes que llevar el DNI en la boca, te hacen un seguimiento del copón conforme más pisos vayas a subir…….., yo no lo se, pero te aseguro (me jugaría un cuto) a que no las reparten más que en «petit comite», y en este caso para sacar este año nuestras invitaciones alguno se habrá quedado en casita, o habran metido este año ha más gente, que me parece que será lo que habrá pasado…….. Mi admiración hacia ELLA???, te parece????, las cosas a veces no son como parecen ser, jajajajaja
Alguno apareció sin el escudo oficial (de eso os podré hablar si quereis más adelante, que aún esta el tema revuelto, jejejeje), pero lo solucionamos pidiendoselo a un compañero, y punto. La verdad que no, que no nos pasó nada, joer, te parece poco con lo que me paso a mi el día anterior????, jejejeje
Sí, después de lo vivido el día 5, el día 6 casi que fue hasta aburrido.
Imagino que es un subidón el vivirlo en el ayuntamiento, pero yo preferiré siempre estar abajo, me atrae más.
Yo sinceramente??? (aunque claro, ya lo he vivido y se lo que se siente arriba), me quedo con verlo abajo, para mi no tiene color, son sensaciones muy distintas, pero yo el 6 después de las 12 estaba como que me faltaba algo….., y creo que fue ese estar en la plaza, ver el cohete en el cielo estallar (cosa que desde el Ayto no pude), ese esperar a los txistularis, a los gaiteros, y a nuestra querida PAMPLONESA………., yo me quedo con verlo de abajo tb.
Yo por motivos familiares llevo ya varios años teniendo que disfrutarlo en los alrededores, y coincido con la sensación de que me falta algo, el día 6 no es igual. No está mal, pero eso de entrar a menos 3 minutos, vivir el subidón, salir con las oleadas, volver a entrar a bailar, y subir la Chapitela con la Pamplonesa no tiene nada que ver con escuchar el txupinazo y empezar a echar cervezas y fritos en las aceras.
yo tambien pienso igual, creo que no hay nada igual que vivir esa sensacion del txupinazo desde el corazon, desde dentro, te estrujan, te pisan, te hacen practicamente de todo, ( o casi), pero no es igual empezar sanfermin desde dentro que desde fuera, aunque toko toko, tu posicion tampoco es mala no?.
despues de mas de 25 años ininterrumpidos entrando, este año no ha podido ser, espero que el año que viene entremos los dos mas uno…
No se donde será mejor, pero a mi me encantaria poder disfrutarla en el Ayunta, aunque sea un año.
Lo que falta arriba es el grito al cielo que te pegas con el subidón del comienzo de las fiestas, el abrazarte a un colega como si hubieras metido un gol en la final del mundial. Me imagino que arriba habrá que guardar las formas, y los impulsos, vamos como estar en el palco del Bernabeu.
Pero tiene que ser la leche vivirlo aunque sea una vez desde arriba no???ya estoy con ganas de leerte más toko-toko, a ver cómo sigió el día y sobre todo cómo acabó…habrá que esperar.jejeje.
Pues como he dicho antes, es una experiencia más, pero vamos, que una y ya vale, yo el año que viene al meollo, que hasta heche de menos el olorcillo a champan, mezclado con sudor, colonias y desodorantes (los menos, jejejeje).
Aparte de que no me gusta el número de comentario que se iba a quedar, ya que soy bastante supersticioso, jejejejeje.