LEJOS
Miré la fecha del calendario. Soñar no cuesta dinero, pensé. Me acordé de Patxi y Mikel que, dentro de poco, estarían corriendo el primer encierro. Encendí la televisión, pero no pude sintonizar el canal internacional de TVE. Recordé las palabras de mi madre el día que partí: no te marches tan lejos. Entonces, nunca creí que echaría tanto de menos el olor a pólvora, los cánticos, las peñas y las camisetas manchadas de vino. Conecté el ordenador, pero la cámara de la webcam me avisó que ella tampoco estaba en casa. Adiós dulces recuerdos, adiós… Me metí en youtube a ver algunos vídeos antes de irme a trabajar, pero enseguida pensé que, para vivir de verdad los Sanfermines, había que estar allí, porque lo de los vídeos era como comer comida enlatada. De pronto, me acordé del concurso de microrrelatos que organiza blogsanfermin. Leí algunos micros. Me reí con alguno de ellos, y con otros, no pude remediar que saliera de dentro de mí una lágrima de nostalgia por no poder estar allí. ¿Por qué me tuve que ir tan lejos? Eterna pregunta que sólo admite una respuesta. El paro entre los jóvenes en España es superior al 50%. Dramática razón, pensé.
Ángel Silvelo Gabriel
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El ajoarriero
Todo mozo de peña tiene un deber de alto nivel. Una obligación ineludible con la cuadrilla que debe afrontar con rigor y responsabilidad: la merienda de los toros. El día que te toca, el contenido de la cazuela indica, no solo la calidad gastronómica, sino además la altura del compromiso. Compré bacalao para mi día, confiado en la colaboración de mi mujer con su receta de ajoarriero. Pero el entusiasmo de mi pretensión se zanjó con un ¡a mí no me líes!, con el que mi consorte allanó mi solicitud. Miré aquel bacalao en remojo y vi sumergidas con él todas mis ilusiones. La plaza de toros de Pamplona es la única del mundo en la que el espectáculo también está en el tendido de sol. El locutor de televisión que comentaba la corrida, hizo mención al curioso afán de de un mozo de las peñas que desplegaba, al término de cada faena, un cartel de dimensiones generosas en el que se leía: “Kontxi, hazme ajoarriero”, haciendo un llamamiento a la destinataria del mensaje para que atendiera el importante requerimiento, habida cuenta del empeño del protagonista. Al día siguiente en la plaza pasamos calor y la corrida fue floja, pero el ajoarriero estaba buenísimo…
Carlos Campión Jimeno
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ZAPATILLAS DE FUEGO
HUELE A VERANO ATRAVESANDO EL ARGA, PALACIO DE RANAS ENTONANDO SU CANTO MATUTINO, ESTRUENDOSA LABRIT EN UN DEVENIR DE BLANCO Y ROJO TRASPASANDO EL VALLADO, UNA MEZCLA DE SANCHO EL FUERTE Y UN PARTO DOLOROSO ESTREMECE MI CUERPO, MIRO LAS NUBES TRANSFORMADAS EN SONRISA DE AQUELLOS QUE SE MARCHARON, ENTONANDO UN «QUIERO QUE SEAIS VELOCES». LAS MANOS APRIETAN EL CHUPINAZO EN FORMA DE PERIODICO, DE LADO ATRAVIESO UN MAR DE ALMAS QUE DA PASO A UN PICASSIANO TRANVIA DE NEGROS COLOSOS, CORRED!! CORRED ZAPATILLAS!! CIEN METROS CON EL CORAZON EN MIS PIERNAS … FUEGO, ARENA… PAZ
Alberto Orcoyen Romeo
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