Echando la vista atràs, y recordando como fueron nuestros sanfermines adolescentes, entre los 12 y los 16 años, recuerdo aquellos años con una mezcla de añoranza y acojono.
Añoranza porque fueron unos años donde despertamos poco a poco hacia la juerga, las chicas, y el aprendizaje de como divertirse en fiestas.
Acojono porque mi hija mayor va a entrar en esa misma etapa, y cuando pienso en la fauna y el mundillo que hay por ahi, pues empiezo a preocuparme.
Vayamos por partes. Nuestra generaciòn tambièn probamos el alcohol hacia esa edad. El botellòn ya existìa entonces, con la diferencia que èramos mucho mas limpios eso si. Habìa macarras y maleantes. Lo que sì habìa mucho menos era sexo, por lo menos para la mayorìa.
La diferencia era que el alcohol nos servìa para divertirnos, como herramienta y no como fin. Nos permitìa tener mas valor para intentar conquistar a las bellas mozas.
Uno ahora lo ve ahora con 25 años mas y como es lògico desde una perspectiva diferente. Tambièn hay chavales que se lo pasan muy bien y de forma sana. Pero hay muchos cuyo objetivo ùnico es emborracharse hasta las trancas, sentarse en el suelo y pasar horas y horas en 10 metros de acera.
Te pones a pensar y dices:¿ Què alternativas tienen los chavales en San Fermìn? Por las mañanas, aparte de los gigantes y cabezudos, y algùn festival en la plaza de toros poca cosa hay.
Por las tardes, los juegos de Conde Rodezno les vienen pequeños. Para ir a los toros les viene grande.
Y aparte de las verbenas de la tarde donde aùn se puede bailar, no se que pueden hacer aparte de ir a las barracas, tan pobres este año.
Espero que alguien me apunte alternativas para que el año que viene pueda presentarle un programa variado, y no tenga que empezar a pensar en que harà por ahì.
A SALOU
Si te soy sincero yo la recuerdo como la edad en que uno era demasiado grande para unas cosas y demasiado pequeño para otras.
No es sonrojante buscar alternativas lejos de Pamplona… ¡y de sus padres!
Si esta mas cerca de los 16 a los toros, que valla pillando el gusanillo del tendido a la vera del padre. y si aun no a llegado a esa edad, lo tienes chungo, eso si, yo me acuerdo cuando tenia esa edad, la de horas que metia en Antoniutti, en la verbena intentando ligar con alguna mozuela de la cuenca o del extraradio, (lo mio no han sido los idiomas) con un ambiente sano y divertido, este año se me ocurrio pasar por ahi para recordar viejos tiempos, y casi me da algo. Aparte del perrea perrea de los cojones eso parecia otro pais (sudamericano claro) vamos acojonadito me quede, ni sombra de lo que habia sido. Pero bueno, no deja de ser un reflejo de la sociedad en la que estamos viviendo.
A las colonias a Hondarribi…