En apenas una semana y unos pocos días pasaremos el ecuador de la escalera y entraremos en la definitiva cuesta abajo hacia los Sanfermines. Para algunos seguirá siendo pronto para pensar en la planificación de las fiestas, ya lo harán a última hora con prisas y algún agobio, en cambio otros llevan tiempo pensando y trabajando en ellas.
Los Sanfermines son unas fiesta complejas, con multitud de actos oficiales, no oficiales y particulares, que requieren de una organización esmerada y que además cuenta con un evento característico que se celebra todos los días del 7 al 14 de julio a las 8 de la mañana como es el encierro, en el que todo aquel que quiere, aunque debiera ser todo aquel que sabe lo que es y lo que arriesga, que puede ya que se encuentra en condiciones óptimas para acometer el reto y quiere afrontarlo conociendo las posibles consecuencias de sus actos, se juega la vida.
Para que toda esta maquinaria funcione es necesario poner en marcha unos dispositivos organizativos y logísticos de los que nos somos conscientes ya que siempre están ahí y únicamente los echamos en falta cuando algo falla y, en algunos casos, aunque nada haya fallado y la fatalidad nos haya echo una visita, indeseable pero siempre posible, en forma de cornada mortal en el encierro, aparecen los charlatanes creadores de opinión, o eso creen ellos, hablando sin conocimiento de causa y abogando por prohibir (cuanto gusta a los políticos esta palabra) el encierro.
Y no estoy pensando únicamente en la parte oficial, que bastante tienen con todo lo referido al orden, delincuencia, sanitario, transporte, aparcamientos, etc. si no también a niveles más pequeños, como las peñas cuyos dirigentes ya comienzan a tener sudores fríos con todo el trabajo que se avecina, Meca, Comparsa de Gigantes y Cabezudos, La Pamplonesa, asociaciones, bares, txarangas, cuadrillas y todos aquellos que hacen posible que los Sanfermines sean lo que son.
Como dicen los toreros, Va por Ustedes.
(Sanferman, me debes una).
Pero son una gozada las primeras reuniones para empezar a preparar todo. A pesar del trabajo que conlleva, hace que te metas en las fiestas mucho antes…Ya se me hace la boca agua.
Dí que si.
Después del largo invierno llega el deshielo y ya empiezamos a ver como empiezan a entrar las prisas en algunos preparativos.
Por cierto ¿quién tirará el cohete este año?
En Facebook hay un grupo que pide que lo tire la Comparsa pero me imagino que lo tirará el concejal de turno.
Me temo que el concejal de turno es de esos a los que no les dejan tirarlo.
Que lo tire Ignacio Polo, concejal delegado de protección ciudadana, que además, es banderillero, quiero decir, es practicante en el ambulatorio de San Juan.
Familiares míos han sufrido en sus carnes sus mortales banderillas, que incluyen cardenales de tamaño más que considerable.
Una sugerencia para post: tema de los carteles de SF y el jurado popular, que está bien, pero que hace todo como muy democrático y tal, y a veces se pierden ciertos criterios cuando todo es tan democrático y tal.
saludos