UNIDOS
Julia Ruiz Lacruz
La vida es como una piñata en una fiesta, nunca sabes lo que te va a saltar.
Por eso este año, San Fermín y sus fiestas tendrán que esperar.
Como largo camino sin posadas se hará;
pero ilusionados y dispuestos estaremos para celebrar.
San Fermín, célebre fiesta a nivel mundial;
modelo y ejemplo intercultural.
Un pedacito de tierra cada una de sus gentes,
y todos unidos conforman continentes.
San Fermin UNE.
Todos unidos alzaremos la copa para brindar,
por San Fermín y sus fiestas,
aunque se hagan esperar.
POR QUIÉN DOBLAN LAS CAMPANAS
María Soledad García Garrido
Le rogué que me abriera las puertas, pero remoloneó con las llaves.
−Sabes que quitarse la vida es pecado y que aquí arriba los pecados los llevamos muy mal. Ni siquiera te has confesado.
Finalmente, convencí a San Pedro para que me anotara en el libro de registro. A última hora uno espera que lo acepten en el paraíso. Tampoco me había portado tan mal y, en realidad, qué más habría deseado yo que evitar mi muerte.
Como prueba de ello, tanteé mi bolsillo y le enseñé la reserva del Hotel La Perla. Mi intención había sido volver a Pamplona. ¡Cómo perderme la faena del maestro Ordóñez! Lo imaginaba partiendo hacia la plaza vestido de grana y oro, con su montera y la muleta al brazo. Le aclaré que nada me habría hecho más feliz que regresar un año más a la fiesta.
Lo soborné con un ejemplar dedicado de El viejo y el mar. San Pedro se alisó la barba y me pidió, emocionado, que le explicara más a fondo lo de los sanfermines.
−Ernest, qué aburrido es esto de vigilar sobre una nube −admitió.
Cuando atravesé la puerta grande, resonaron los acordes de El gato montés de Penella.