XII Certamen Internacional de Microrrelatos de San Fermín


MI PEQUEÑA REVOLUCIÓN

Juan José Faro Bueno

Un vez acabado el curso escolar, en plena efervescencia adolescente, me vi con trece años y en contra de mi voluntad, en aquel campamento con los curas en las faldas del monte Arangoiti, en la Fuente del Mosquito. Allí iba a pasar mis fiestas. A causa de mi rebeldía, era castigado de forma continua. Limpiar, ordenar, obedecer. Mientras sacaba brillo a las perolas, mi mente solo veía el blanco y rojo de mis Sanfermines perdidos. Decidido a rebelarme, firmando mi renuncia en una servilleta, arrastré a tres de mis compañeros hacia mi ansiada libertad. Nuestros padres, nada sabían al respecto. Con nuestras mochilas al hombro iniciamos la vuelta a Pamplona, a pie por la carretera, haciendo dedo. Nos recogió un ganadero en su camioneta con la ilusión de llegar a tiempo a la salida de las peñas. Al llegar a Huarte nos separamos. Juan y yo fuimos en villavesa hasta la última parada de la calle Arrieta, pared con Escolapios. Al bajar, lo que se veía era dantesco. La gente corría despavorida. El humo se apoderaba de la plaza de toros. Policía por todos los lados. Allí acabó mi pequeña revolución. Era 8 de Julio de 1978. 

POBRE DE MÍ

Javier Linares Serrano

Sin ni tan siguiera abrir los ojos. Con la cabeza incrustada en la piedra fría del bodegón, busco consuelo en el registro quimérico que quedó impreso en mi piel. Danzas, ritos, ancestros que regresan mecidos por tus gestos, deseos de hoy, de ya, de ahora… Colores con aroma a ti. Todo se desvanece con el azul alboreo que siempre llega porque nada puede pararlo. Grito, pero nadie me advierte con tanto silencio. Ausencia. Solo adoquines empapados que retienen mi lamento con el recuerdo de otros días. Quizá el año venidero. Pobre de mí.