XIV Certamen Internacional de Microrrelatos de San Fermín


PASADO POR LLUVIA

Fran Nore

PASADO POR LLUVIA

Invitaba a mis amigos a la Feria de San Fermín, comprábamos souvenirs y otras fruslerías, alborotados y con sonrisas abiertas a los transeúntes.
Hacía una magnífica y espléndida tarde para divertirnos.
Pero luego se precipitó una leve lluvia inusitada que nos alertó a buscar refugio entre risas.
Pasaron caravanas de mujeres y niños bajo la lluvia, felices y juguetones.
Un desfile de músicos amilanados estaba paralizado en las esquinas de las tiendas.
Pasada la lluvia, disipada por un leve sol aparecido entre nubes nostálgicas, volvimos a nuestro jolgorio, en espera de algún otro suceso inesperado.
Resultó que no había nada que esperar, sólo se veían personas y visitantes disfrutando de las tiendas comerciales y del variable clima.
– Debemos regresar -le dije a mis amigos.
– Todavía un poco más -replicó uno de ellos-, hay mucho que disfrutar…
– Ciertamente… -atinó alguno más.
Me di por vencido de insistir en disuadirlos, pasábamos momentos tan gratos y agradables, entonces no quise aguar con mi actitud aquellos instantes.
De nuevo comenzó a llover ligeramente, está vez más fuerte; y toda la feria se descompuso. Los transeúntes corrieron a buscar refugio. Las atracciones se detuvieron, y nosotros permanecimos inmóviles con nuestras amplias sonrisas desdibujadas.

 

CORAZONES BLANCOS Y ROJOS

Francisca Abeleida González

Al sonido del Chupinazo, Paloma se anuda el pañuelo rojo al cuello, con su corazón acelerado de tanta emoción, iniciando junto a su amado, celebración tan esperada por ellos durante un largo tiempo, ya que Javier oriundo de Pamplona, siempre le había narrado a su mujer lo especial y sinigual de esta Fiesta, que lamentablemente por diversas razones, compromisos laborales, distancia geográfica y un sin número de imprevistos, fue demorando más de lo querido, haciendo de este viaje una travesía inolvidable, disfrutando al máximo sus diversas actividades, compartiendo con las multitudes, deleitándose con la música, bailes, comidas y bebidas, vivenciando ella la alegría, adrenalina y devoción con la que su pareja siempre recordaba San Fermín.
Terminando los nueve días de aventuras, paseando por los bellos jardines del parque de la Taconera, donde ella bebe un café, riendo y recordando cada detalle de las anécdotas vividas, despidiéndose finalmente con un suave beso de su amado, para luego esparcir las cenizas de su esposo, en su tierra natal como él siempre había querido, teniendo claro que esto no era un adiós sino un hasta luego, ya que el próximo año en esta misma fecha, se reencontrarían para continuar con los festejos y alegrías.

 

QUEREMOS BESARNOS

Francisco Barragan Larreta

Tarde del 30 de junio de 2022 en cualquier lugar de Pamplona
– Haremos unas en rojo con la silueta del santo en blanco, dijo uno.
– Mejor en blanco y con una serigrafía del encierro, replicó otro.
– Pues a mí me parece que hacerlas en un fondo neutro y con los escudos de las peñas, sería perfecto apuntó un tercero.
– En mi opinión, si las hacemos con los lugares más emblemáticos de los sanfermines, podría ser un puntazo comentó el que estaba al fondo del todo apuntándolo todo.
Se hizo un silencio en la habitación, un momento de esos en los que nuestras abuelas decían que acababa de pasar un ángel y fue ella, que hasta entonces había estado callada escuchando las ideas de los demás, quien habló
– No vamos a vender ninguna. La gente no quiere mascarillas. Lo que nos apetece es reír, cantar, gritar, beber, comer y disfrutar. Lo que queremos es besarnos.